LO QUE EL VIENTO A JUAREZ
Por Eddie Villa Real
Pocas personas, quizás alguno de mis cuatro lectores sepan, de donde viene este viejo dicho que ya tiene más de 150 años. Resulta que Don Benito, (y no, Bomberito como dijo el Loco Valdez, que le costó un rato en el frescobote y una multota de varios miles por irrespetuoso), cuando era jovencito andaba por los cerros de Guelatao pastoreando sus ovejas, y se desató un fuerte ventarrón que tumbo techos, palapas y árboles. El Sr. Cura de la localidad que era su padrino, y que se preocupaba mucho por él, pues era su mentor y sabía perfectamente que había que educar a este indito pues estaba convencido que con esa inteligencia clara y sobre todo la prodigiosa memoria, iba a llegar muy lejos, esperó pacientemente a que regresara y cuando lo vio sintió un gran alivio y acercándose le preguntó, solicito y preocupado (por sus ovejas obviamente): ¿Benito, que te pasó, no perdiste ninguna oveja? Que te hizo el ventarrón? El indito, con cara de burro chiquito, morenito y socarrón, le contestó al cura con voz de indito-corneta oaxaqueña. “No se preocupe, Sr. Cura, no me pasó nada, no se me perdieron ni una de sus ovejas”. ¡El viento nada más me arriscó el sombrero! Y de allí se pasó de boca en boca la famosa frase que llega hasta nuestros días de: “A fulanito no le pasó nada pues sutanito le quiso hacer daño, pero se defendió muy bien o sea que sutanito” LE HIZO LO QUE EL VIENTO A JUAREZ, le arriscó el gorro , que coloquialmente es lo mismo.
Posteriormente llegaron una bola de albureros y tergiversaron totalmente el inocente dicho que se hizo famoso y le dieron otras interpretaciones. Bautizaron el sombrero como el prepucio que como todos sabemos, sube y baja cuando no se ha realizado la circuncisión, o sea que cuando baja, se asoma el glande y entonces todos gritan a coro: “Se la peló” Y entonces con los siglos que han pasado, la asunción, (de asumir que no tiene nada que ver con la virgen María). fue cambiando de rumbo y ahora se dice con toda tranquilidad que cuando alguien quiere dañar, o cobrar o engañar o chingar (para usar la palabra más que coloquial que Octavio Paz, describió perfectamente en su laureado libro), y no lo consigue, entonces é, l muy orondo y feliz al haber triunfado en su causa justa dice sencillamente: SUTANITO ME LA PELÓ queriendo decir que le arriscó el sombrero o bien que le hizo lo que el VIENTO A JUAREZ.
Y esto viene a colación por lo que esté sucediendo en Juárez, Chihuahua. Las fuerzas del mal gritan a voz en cuello y publican en sus narcomantas que el gobierno y el ejercito les está haciendo lo que EL VIENTO A JUAREZ. Y mientras tanto el pueblo de Juárez, lo que se llama la gente buena y sencilla (como la Sra. madre de los dos hijos inmolados entre los 16 estudiantes muertos por el artero ataque, con los calzones en la mano se atrevió a decirle sus verdades al Presidente de la República, en su cara y en presencia de su Sra. Esposa y demás miembros del gabinete que asistieron con caras de piedra angulada que no podían dar crédito a lo que estaban escuchando), sí, esa buena gente, sigue mentando madres al gobierno y al Ejercito pues no comulgan con ruedas de molino. Los discípulos del Gral. Galván también tienen los suyo, es decir que no se la vaya a creer que sus soldaditos tratan al pueblo como si fueran niñas quinceañeras. A los sospechosos, los someten a toda clase de torturas para que canten aunque muchas veces no se saben ni la introducción, (como en el caso de LA PALOMA). Lo que salvó a Calderón y a su cara compungida, fue que impidió que un guardia presidencial arrastrara a la buena señora (para que posteriormente la madrearan y la encarcelaran por algún delito de DISOLUCIÓN SOCIAL. Su voz, fue muestra representativa de lo que pensamos todos los mexicanos sin excepción, (por supuesto menos los que están viviendo dentro del presupuesto o fuera del “terror” como diría ahora el Tlacuache.
Hay muchos vientos que son de origen natural, inclusive los flatos intestinales que salen empujados por los movimientos peristálticos y que dieron origen a la palabra “pedo”. Ahora se describe como eso a todo lo que significa bronca, problema, pleito, etc, (favor de ver mi editorial TAPAR EL SOL CON UN PEDO publicado en EXPRESIONES DE TULUM Y PLAYA recientemente) Y eso es precisamente lo que quiso hacer Calderón en Juárez. TAPAR EL SOL CON UN PEDO. Si, organizar un borlote con todo su gabinete para tratar de tapar al solesote en forma de Astro Rey, que disfrazado de broncas y desastre está brillando en esa ciudad del Paso del Norte, (Así se llamaba antes, para mis cuatro asiduos lectores). Pero lo que brilla, lo que se dice brillar por su ausencia son los resultados de tanto soldado, tantas tanquetas, y tantas AK40 de los policías federales, estatales y municipales que como los matrimonios de muchos años, que están en “tratamiento”, es decir, que él trata y ella mienta.
Pues, “tratamiento”, ésto, es precisamente lo que está ocurriendo en Juárez, entre el Presidente Calderón, “el trata de “meter” la cosa dentro del orden normal y ella, o sea la paciente población de por allá, se la pasa mentando.
No soy el único. En mis editoriales publicados en EXPRESIONES lo grite a voz en cuello. En “CON QUE GUERRITAS, EH?” se lo repetía una y otra vez. La guerra contra el narco no tiene fin, ni propósito otro que dejar muy contento al embajador gringo con nombre de chicano y sus jefes gueritos. Claro que no. Lo dijeron en unísono Zedilo y el expresidente de Colombia. LA UNICA MANERA DE ACABAR CON ESTA GUERRA ES HACER LO QUE LOS GRINGOS HICIERON EN VITNAM (retirarse calladamente). Hay que legalizar la droga y tomar ejemplo de lo que paso en los EEUUAA en 1929. A algún desorientado diputado se le ocurrió que el alcohol era muy malo, (y vaya si lo es en demasía) y juntó firmas y pasaron una ley para prohibirlo. Se dejaron venir miles y miles de toneladas de alcohol de Canadá y México de tal manera que el consumo se triplicó, los crímenes, y las batallas de guerra entre los que controlaban las plazas se contaban por miles. La mafia de Chicago contra la de Detroit y ésta, contra la de New Jersey que controlaba todo Nueva York (de donde salió Frank Sinatra). Era una matazón únicamente comparable a lo que está ocurriendo en Juárez o Culiacán. (Para variar, siempre lo malo de México está dando la vuelta al mundo. En una caricatura de una revista internacional, una plaza de toros, gradas repletas de gente con puñales y machetes, matándose unos a los otros y en el ruedo el toro y el matador con cara de sorprendidos y con los ojos de rana abiertos totalmente azorados, se sentaban en la arena a observar la matazón. Arriba de la plaza, la bandera mexicana, bostezaba ondeando perezosamente bien aburrida de contemplar más de lo mismo todo el tiempo, pues ya está más que acostumbrada).
Como le hicieron los gringos para acabar con la guerra entre mafias?. Pues muy sencillo. Legalizaron el alcohol y de un plumazo. Primero los mafiosos se convirtieron todos en comerciantes muy eficientes luego en millonarios y después en políticos como los Keneddy. Jajaja. Y el consumo bajó a los niveles en donde estaba antes y todo el pueblo fue muy feliz y colorin colorado. ES TAN SIMPLE LA SOLUCION QUE LA TENEMOS FRENTE A NUESTROS OJOS. Pero hay que recordar que no hay peor ciego que el que no quiere ver y peor idiota que no distingue el bosque porque los arboles se lo impiden.
Todo el mundo lo está pidiendo a gritos y esto no tiene que ver con los adictos a las drogas. A ellos obviamente les conviene, pues el precio se va a ir al suelo. La mota va a estar a precio de chaya o de lechuga. La coca va a valer lo mismo que cuando se vendía libremente antes de que en 1926. La Bayer la prohibió en Europa y en EEUUAA para que se vendiera su famosa ASPIRINA, y los fumaderos de opio van a ser tan baratos como en Hong Kong. Hay que recordar que si alguien se quiere poner hasta el queque de droga, no va a haber ningún bravo que lo pueda detener. A cada quien su vida y el que así lo desea, hace de su cola un papalote. Lo que se debe y se puede evitar es que los jóvenes no se inicien en ella a toda costa prohibiendo el narcomenudeo.
Así que, Don Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, mi muy respetable y nunca bien ponderado Sr. Presidente, (en lo personal pienso que es un buen hombre de familia, honrado y muy buena fe pero con mala suerte porque se sacó la rifa del tigre), le digo con todo respeto que se debe hacer en este caso: Conviértete en fiel seguidor de la LEY DE EDDIE MURPHY: ¿QUIERES QUE EL NARCO TE HAGA LO QUE EL VIENTO A JUAREZ? Pues muy sencillo, deja a los gringos que se rasquen con sus propias uñas, legaliza las drogas y deja el libre tránsito para que fluyan alegremente ALLÁ a donde más las necesitan. ESO SÍ, DALE INSTRUCCIONES A TUS MILITARES, POLICIAS Y GENDARMES QUE SI PESCAN A UN NARCOMENUDISTA VENDIENDO EN UNA ESCUELA, O EN UNA VECINDAD, QUE LO CUELGUEN DE LOS TOMPIATES HASTA QUE SE PUDRA EN EL SOL.
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