LOS AGUZADOS Y LOS ABUSADOS
Por Eddie Villa Real
En esta vida no hay más que dos clases de personas. Las naranjas y los exprimidores de naranjas. En otras palabras hay que recordar la frase célebre de un profundo filosofo mexicano que dijo: Aqui cada quien se agarra a su pendejo. Como en la pelicula de Bette Davis y Joan Crawford. Ella era paralítica y en su silla de ruedas traía como trapo de limpiar pisos a su hermana que abnegada obedecía ciegamente las ordenes de la parapléjica que le gritaba las ordenes y no la bajaba de ineficiente e idiota.
Si hacemos un repaso a la historia de México, inmediatamente podernos detectar quien era la naranja y quien el exprimidor. A Hidalgo lo exprimieron a tal grado los intereses de los que querían independizarse del gobierno de Pepe Botella, hermano de Napoleón que le influenciaron para que gritara VIVA FERNANDO VII y MUERA EL MAL GOBIERNO. El nunca quiso ni se imaginó que su grito de independencia iba a terminar en un México libre y soberano en 1821. En igual forma Iturbide que había sido un oficial de las fuerzas reales, chaqueteo y vio como sus intereses personales podrían ser mejorados si se encontraba unas naranjas gorditas y llenas de jugo que por nombres de Vicente Guerrero y Guadalupe Victoria, se dejaban exprimir hasta la última gota y fervientemente y con ciega fidelidad lo siguieron hasta que se firmó el Plan de Iguala que culminó con la creación de nuestra Republica Mexicana. Ah y todavía se dio el lujo de poner a Victoria como primer presidente, a sabiendas que lo que él estaba preparándose para convertir a México en un imperio en donde posteriormente se coronó solemnemente como Agustín Primero. Ese fue el primer imperio que duro poco afortunadamente, pero poco después unos cabrones poco patriotas, se les ocurre conseguir una naranja europea y con la bendición de Napoleón y de Francisco José, Emperador de Austria, ensartaron al pobre de Maximiliano para exprimirlo mediante un juego clásico de Yucatán de hacerlo creer que era el bueno, le exprimieron a tal grado que terminó siendo fusilado en el cerro de las Campanas por un Juárez que impávido se negó a concederle el perdón, a pesar de que Carlota se le arrodilló desabrochando los botones de su pantalón, según la crónica, le otorgo favores orales que no sirvieron para nada. La naranja de Maximiliano, junto con otras dos, Miramón y Mejía, por traidores fueron exprimidos para toda la eternidad.
Pero el cuento no termina aquí. Los gringos, la Iglesia y Santa Ana que habían sido los exprimidores eternos de naranjas, dieron una lana y metieron presión política y cuando Iturbide regresó de Europa a recuperar su trono imperial, fue también fusilado en Padilla Tamaulipas, sin juicio sumario ni nada que se le pareciera.
Y luego viene la lista interminable de naranjas y exprimidores que si la incluyéramos completa terminaríamos convirtiendo este cuento en el más largo del mundo con todo y su record Guiness. Juárez convirtió a Porfirio y Lerdo de Tejada en sus naranjas favoritas. Pero luego Don Porfirio hizo lo que Iturbide no pudo. Por medio de un truco de magia negra, transformó a México en una naranja gigantesca durante 30 años y vaya que si la exprimió. Nos dejo secos y heredamos miles de millonarios del porfiriato que hasta ahora conforman las trescientas familias ricas de nuestro pobre país. Luego Madero quiso sacarle jugo a a Don Porfirio pero se le peló para Europa donde murió solo, triste e ignorado en una amarga tumba en las afueras de París.
Nuevamente llegaron los gringos y a través de su embajador Wilson y su esbirro Victoriano Huerta , agarraron a Don Panchito y lo exprimieron tanto que lo mataron en Lecumberri, iniciándose la decena trágica que únicamente puede ser comparada a la DOCENA COMICA que organizaron años después Echeverría y López Portillo que fueron los causantes de la desgracia que aún padecemos con todo y que el PAN, quiere enderezar las cosas pero no puede. Luego Don Venustiano convirtió a Huerta en un generalito de Zarzuela y lo mando a los EEUUAA, para que llegara Obregón, y con un clásico quítate tú para quedarme yo, le exprimió todas su noble sangre en Tlaxcalentongo y quedarse en el poder un buen rato. . Si lo hizo Don Porfirio, porque yo no?, y le valió madres el SUFRAGIO EFECTIVO Y NO REELECCIÓN y se religió, pero llego el exprimidor de naranjas número uno de este planeta, o sea la iglesia y en la Bombilla, encontró su artefacto en manos de un cristero y de la madre Conchita. En la misma forma Calles, pensó lo mismo, y se puso en el sillón para después poner a tres peleles que obedecían ciegamente sus órdenes pues sabían que era el exprimidor en turno. El letrero en la presidencia de aquello de que EL QUE MANDA VIVE ENFRENTE. Ahora el turno le tocó a Cárdenas y lo desterró una noche para que no volviera el más grande estadista que ha tenido México. Plutarco Elías Calles, que todavía no se le hace suficiente justicia por lo que organizó. El Pri, los sindicatos, el Banco de México, Vasconcelos en Educación y otros más que eran sus naranjas pero que producían resultados positivos. Y así podemos continuar de uno en uno hasta llegar al ejemplo clásico de naranjitis vs. Exprimidoritis como fue el caso de Foz y de Marthita, con sus polluelos entenados incómodos. Dicen que Fox, solo cometió un solo error en su administración y que todo lo demás fueron consecuencias trágicas. Qué necesidad tenía de casarse con Martha si ya se la estaba comiendo a gajos. Es decir que él era el exprimidor y Martha la naranja jugosa, que según él estaba buenísima. Si hubiera seguido como estaba, no hubiera pasado nada y los Bibriezca hubieran seguido en el letargo histórico, en donde dormían plácidamente. Ah no, pero se le ocurre a la buena Sra. que quiere casarse como Dios manda y organiza un divorcio eclesiástico y el buenote y grandote de Fox, ahí va de naranjota y se deja exprimir. Los resultados todos los conocemos. Quiso pero no pudo, trató pero no consiguió, hacía como que hacía, pero no más dejaba pasar el tiempo para irse a su Hacienda en San Cristóbal, dejando al PAN en manos inexpertas que lo están convirtiendo en TORTA que a base de mordidas y tarascazos los tres angelitos del PRI se la van a comer enterita.- Gamboa, Beltrónes y la Menchu Mexicana, que parece vendedora de atoles y guajolotas (teleras con mayonesa con un tamal de elote por dentro) en una esquina de Tepito. El resto de la historia está por escribirse y de acuerdo al libro de este mismo autor LOS ERRORES DE DISIEMPRE. AGUAS AHÍ VIENE EL PRI, nos van a convertir en naranjotas jugosísimas por los próximos 70 años a menos que no nos dejemos y ahora si los vigilemos como halcones o bien se organice un estallido que va a oírse, hasta la luna, pues se van a levantar los 30 millones de pobres muertos de hambre y en busca de comida van a meterse a huevo a los supers y tiendas y a ver quien los para. Un ejemplo vivimos aquí en Tulun, Playa y Cancún durante el huracán Wilma. Una bola de desarrapados que se metieron a las tiendas y saquearon todo. Hasta el caso de risa de un sombrerudo que cargo una lavadora enorme y se la llevo en vilo y los policías ni lo voltearon a ver. LES VALIO MADRES.
Pero los casos de naranjas y exprimidores no solo se dan en la política sino también en la calle, como el ejemplo clásico del franelero que trae a su wash and wear, o sea el lavador de coches como su pendejo, ejemplificado cómicamente por los famosos Polivoces de antaño que ahora los extrañamos al ver a los cómicos de la tele que dicen puros chistes muy trillados. No hay remedio, ya se nos está agotando el ingenio. Ah, pero dentro de los hogares vemos miles de casos en donde un padrastro exprime a su hijastra para sexualmente horrarse los quinientos pesos que debería de pagarle a una prostituta en la esquina. Por eso el dicho que carne buena, cómoda y barata la de la gata. O bien la esposa que por miedo de que le levanten la canasta deja que la expriman a ella y a su hija por el padrastro, que llega bien ebrio en la noche y después de echarse un volado para ver a cual cama se mete, se presume a sí mismo por macho pues tiene dos lugares de entrego de leche en su propia casa. Son miles de ejemplos iguales en donde los aguzados, o sea que son como agujas, pican y sacan el jugo de las naranjas en que están convertidos los abusados o las abusadas.
El dicho se ha degenerado a tal grado que ahora hay gente que se atreve a decir que fulanito es muy abusado y bien listo. Error fatal, pues deberían de decir que es muy aguzado. El famoso Juanito de gran actualidad, siempre fue un agusado y se chingó a todos los locatarios de Ixtapalapa que controlaba. Hasta que llegó López Obrador y lo convirtió en un abusado, ya que lo dejó al final sin el preciado tesoro de las arcas de esa Delegación.
Y así por los siglos de los siglos, vamos a ser un pueblo de abusados hasta que nos cansemos. Dice el dicho que el listo nada más llega hasta que el pendejo se harta. Y así va a pasar. Con el tiempo vamos a dejar de ser abusados y poner el orden en nuestra casa. No es posible que un país que tiene tanta riqueza, playas, minerales, bosques, tierra cultivable, esté en el lugar 52 de todos los países del mundo. Algo mal debemos de estar haciendo y tenemos que detectarlo y corregirlo. Si que nos convirtamos en exprimidores de todos los demás países de este planeta y que dejemos de jugar el eterno papel de naranjas que mecánicamente nos exprimen, empezando por los gringos y luego siguiendo en la lista por los países primermundista.
Sí, que dejemos el papel de abusados y que nos convirtamos en agujas, picudas y afiladas para sacarle jugo a los demás y que por fin nuestro país se convierta en primermundista, en donde por siglos ya debería de estar de acuerdo a los recursos con que contamos. Es decir que pasemos de ser abusados a aguzados.
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