LEY DE EDDIE MURPHY
CASUALIDAD O CAUSALIDAD
Eddie Villa Real

Mis seis lectores lo deben de recordar.  Hace mucho tiempo les informé por medio de un editorial, (cuyo título no recuerdo ya que padezco de Alzheimer selectivo, o sea que solo me acuerdo de lo que me conviene o bien de lo que sucedió hace pocos días). Entonces les confirmé que en política no existen las casualidades ni las coincidencias. Todo es producto de la CAUSALIDAD o sea de algo perfectamente planeado de acuerdo a sus mezquinos intereses, es decir, el de los funcionarios, gobernantes, mandatarios, congresistas, operadores, manipuladores, según sea el caso.
Y todo esto viene a colación, muy oportuna por cierto, por el hecho de que todo mundo dice y se pregunta: ¿Será casualidad de que el mismo día que soltaron a Fernández de Ceballos, ocurrió  la explosión terrible en San Martin Texmelucan?, (que dejó montones de muertos, heridos y más quemados que el gobierno por no haber previsto una cosa que era perfectamente predecible por nuestros sagaces y listos investigadores del Centro de Investigación Nacional, o como se llame el equivalente de la CIA gringa que todo lo sabe e investiga con increíble “perfección” como fue el hecho de haber “detectado” en Irak un chorro de armas de “destrucción masiva”, lo que permitió a Bush organizar la invasión y poderse quedar con el petróleo de la segunda reserva mundial de hidrocarburos)

Según primeras declaraciones propias del Director de Pemex, que fueron “misteriosamente” cambiadas después,  en la parte alta del pueblo de San Martín, los que organizaron este pseudosabotaje, hicieron un pozo de más de dos metros de largo y ancho,  con profundidad suficiente hasta llegar al oleoducto de 24 pulgadas de diámetro que bombea el crudo hasta el DF en Puente de Vigas. Justamente allí la presión es mayor pues existe una enorme planta de bombeo, cosa que aprovecharon los malandrines para realizar una grieta o rotura, que de inmediato llenó el pozo hecho con pala y pico a la sombra de la noche.  El derrame fue enorme y rapidísimo. El crudo fluyó hacia abajo llenando el cauce del Rio Atoyac y corrió por las calles y banquetas en las zonas bajas del pueblo.  Algunas personas, todavía con una gran inocencia que les costó vida o quemaduras, se despertaron a las 4 de la mañana y dijeron:”Qué barbaridad, huele mucho a chapopote. Debe  ser que, ¡al fin!,   están preparando muy temprano los camiones y máquinas para pavimentarnos las calles”.  Y se echaron a dormir el sueño eterno. Si hubieran sido un poco suspicaces o bien tener la calidad de investigador de sospechar de todo cuando no hay nada de que sospechar, hubieran salido a asomarse y al ver el rio negro de crudo chorreando por las calles, hubieran dado el grito de alarma,

Los malandrines saboteadores profesionales, esperaron tranquilamente a que el petróleo fluyera un buen rato. Quizás varias horas y cuando vieron que ya era bastante y suficiente para armar una bronca de tamaño caguama   que le va a dar la vuelta al mundo, (para variar, pues de México únicamente lo malo se vuelve de fama internacional como ocurrió con las POQUIANCHIS o el temblor del 95).  Quizás, desde la parte de arriba del pozo, sabiendo que el crudo no explota pero si se enciende, le arrojaron una estopa encendida y la parte baja  del pueblo se convirtió en una enorme hoguera, curiosamente,  línea recta a cómo iba el flujo de crudo.

¿Por qué y para que organizaron este dantesco acto? Nadie lo sabe.  Pero sí los resultados que están a la vista. Milagrosamente, desde varios días antes, se había ventilado el secreto a voces de que iban a soltar a Diego y no puedo dejar de pensar en la otra casualidad que ocurrió justamente con el problema de las tres explosiones de gaseoductos de Pemex en el Bajío. Fueron tres seguiditas y como de milagro se detuvieron en el momento que un juez penal, en forma más que misteriosa y milagrosa, leyó un expediente de más de 20 mil hojas en el proceso contra Luis Echeverría, por su obvia culpabilidad en los hechos del 2 de Octubre del 1968 y sobre las rodillas y a velocidad de meteoro, dictó una sentencia absolutoria en un juicio que llevaba varios años y que no se le veía ningún fin ni ningún propósito.  El caso es que milagrosamente, justo al dictarse su inocencia las explosiones dejaron de existir y se durmieron en el cajón de la historia nacional para que el público pensara  que nunca existieron.

Y así podemos citar cientos de casualidades o circunstancias o actos simultáneos que el público dice: “MIRA QUE CASUALIDAD”. Pero de esto mis queridos y ávidos 6 lectores, de esto no hay nada, para nada.  ¿Uds. realmente creen que fue casualidad que justamente el mismo día fueran liberados el Gobernador Figueroa y el General Zuno?, (El primero  estuvo secuestrado largos meses, sí, tanto tiempo que su secretaria que fue inocente víctima, ya que lo acompañaba, fue tomada por las armas y salió en “barata”, como dicen los chavos). Así fue de largo este secuestro que terminó justamente con una faramalla por parte de los miembros del ejército justo el mismo día que fue  liberado el Gral.  suegro de Echeverría, que había sido secuestrado por el Pelacuas, líder de los estudiantes de la UDG de Guadalajara unos meses antes.  Como estuvo el arreglo? Solo Don Luis lo sabe porque el secuestrador fue aniquilado a balazos al salir del reclusorio sur, por haber engañado a un señorón de la mafia, que no le gustó que le gritaran desde afuera de las rejas.  O sea que la verdad, como en este caso de Ceballos, jamás saldrá a relucir y los documentos o archivos se van a echar un clavado y dormirán el sueño eterno en el fondo de los empolvados cajones de la burocracia mexicana.

Tampoco fue casualidad el hecho de que el avión de Beltrónes, hoy flamante senador y participante en la carrera por la presidencia en el 2012  estuviera  listo y lleno de gasolina, (milagrosamente), en el aeropuerto de Tijuana, y que los pilotos estaban esperando instrucciones para calentar motores justo a  tiempo para que subieran al asesino de Colosio, de nombre Aburto y que cuando aterrizaron en el DF, bajaron a un chavo totalmente diferente y que todos lo apodaron “EL ABORTO”  ya que no se parecía en lo absoluto.  La investigación del crimen del candidato llenó millones de páginas en manos de varios fiscales especiales y “todos en forma coincidental” emitieron un dictamen de que no existía evidencia de  ningún tipo de  organización delictiva y que el crimen  era producto de un solitario asesino que no tenía ni idea, ni motivo ni interés de matar a Colosio. Pero hablando de casualidades podemos inmediatamente acordarnos de la que ocurrió unos meses antes. Justo 6 meses con horas de diferencia el que ya estaba destinado o más bien declarado como presidente sustituto en lugar de Colosio.  Le ordenaron a Zedillo que renunciara a su puesto público, pues la ley lo dice claramente que debe de existir un lapso de varios meses de no estar en la función pública y poder ser candidato de la presidencia.  Así, en la misma forma que a los pilotos del avión les avisaron antes que ocurriera el desaguisado,  al Secretario de Estado le habían dicho que renunciara a su puesto a tiempo pues de otra manera no podría ser candidato en caso de que le ocurriera algo a Luis Donaldo, que se encontraba  en su campaña viajando por todo México y debatiendo  en sus apariciones  sobre el tema de que “veía un México pobre, triste infeliz y desgarrado” (palabras más, palabras menos) en un discurso que a “alguien del PRI ” no le gustó.  Colosio   como Robespierre, con ese discurso, firmó su sentencia de muerte.

Y ahora todos los que estamos enfermos de sospechosismo como Creel, no podemos dejar de pensar que así como los del EPR, o más bien alguna facción separatista de ellos, organizó las explosiones en el Bajío, según dicen las malas lenguas vespertinas y que todo “esto”,  estaba manipulado por alguien muy arriba del “ex poder” , que estaba descontento con el proceso contra Echeverría, en la misma forma no podemos dejar de pensar en que los medios dieron la noticia de que los mismos sujetos de ese mismo clan habían organizado el secuestro de Diego Fernández.  Y entonces ya no sabemos dónde quedó la bolita y como dijo el MONJE LOCO, NADIE SABE NADIE SUPO. Pero, lo cierto,  lo que nadie se traga, es  eso de que fueron unos delincuentes comunes   que estaban ordeñando el oleoducto para vender chapopote.  DIOS MIO, DE VERAS QUE ESTOS SEÑORES DE LA ADMINISTRACIÓN PUBLICA PIENSAN QUE SOMOS UN PUEBLO DE PUROS PENDEJOS que no podemos pensar derecho ni bien.

En primer lugar, si hubieran sido ordeñadores, estos únicamente lo hacen en ductos de gasolina o diesel ya que si se conectan  con tubería o mangueras clandestinas en forma directa, pueden llenar pipas y venderlas al otro lado en Texas, como ha quedado perfectamente documentado.  Los oleoductos de petróleo crudo no los ordeñan por la sencilla razón de que no hay mercado y no pueden  venderlo a ninguna refinería para que con grandes instalaciones pueda realizarse el proceso de destilación y que como uno de sus subproductos, resulte la gasolina que puedan vender.

La pregunta que se hacen todos los que piensan y tienen tres dedos de  frente es ¿Si no son ordeñadores o organizadores de tomas clandestinas, entonces quien carajos organizó el pozo de 2 metros de ancho y largo y el hoyo al tubo de 24 pulgadas para que se escapara el crudo?. ¿Entonces qué y quiénes son y porque hicieron ese criminal acto?  La respuesta es bien sencilla.  Los que produjeron ese derrame, lo hicieron siguiendo órdenes de algún Maquiavelo superior que tiene puestos sus ojos y metas que huelen a algún número como 2012.  Nadie sabrá jamás quien ordenó tal conflagración y el por qué.  Lo único que podemos suponer es que éste tipo de actos de sabotaje únicamente puede ser atribuido a esos nostálgicos del poder que no pueden aceptar el ser relegados a segundo término y que reaccionan con violencia para producir caos, dolor y muerte y orillar a los que están en el mando o sea el poder, a que los reciban en la mesa de las negociaciones y que se realicen concertacesiones o bien componendas que de otra manera nunca se les hubieran otorgado. Y es ahora cuando recuerdo el sabio precepto de la LEY DE EDDIE MURPHY que dice:  “SI PARECE PATO, CAMINA COMO PATO Y HACE CUAC CUAC, ES QUE ES PATO,  AUNQUE PEMEX VENGA Y ME DIGA QUE ES GANSO Y QUE LA CASUALIDAD ES PURA Y SIMPLE CAUSULIDAD CON  SU CAUSA Y  EFECTO.
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